A pesar de lo que solemos leer en los medios la verdad es que la mayoría de los científicos profesionales no trabajan en ciencia para mejorar el bienestar de la Humanidad. Hay investigadores biomédicos cuya vocación es acabar con determinadas enfermedades, o ingenieros que trabajan para que tengamos mejor y más barata tecnología con la que resolver nuestros problemas, pero el móvil de la mayoría de los científicos no es mejorar la vida de la gente, sino el conocimiento; la pura y dura curiosidad.
Comentarios
Es un tema de valores, de reconocer al ser humano no sólo como una especie biológica que tiene a su favor una innata necesidad de explicarlo todo, ya sea con dioses o con ciencia. Los científicos como seres humanos que son tienen esa curiosidad, pero también están en una sociedad mercantilista en la que los logros iluminan su ego y engordan sus bolsillos. No hay todavía otros valores más universales que el dinero, y eso porque amortigua la incertidumbre de la vida frente al futuro impredecible. Cuando el humanismo supere al monetarismo (modo iluso = on) quizá veremos otros derroteros.
¿Y que tiene de malo?