Hace 1 año | Por Ripio a labrujulaverde.com
Publicado hace 1 año por Ripio a labrujulaverde.com

La titulatura real era la forma protocolaria oficial con la que se identificaba a los faraones en las inscripciones de templos y estelas, así como en los documentos escritos. Reflejaba su doble naturaleza humana y divina, el poder mundano y el sagrado, con la peculiaridad de que esa nomenclatura no tenía por qué mantenerse igual a lo largo del reinado, ya que podía modificarse para añadirle la referencia a algún hecho relevante que acaeciera: Mentuhotep II, por ejemplo, sumó la expresión “Aquel que une las Dos Tierras”.