Paul Preston analiza en su último libro, El final de la guerra. La última puñalada a la República, las traiciones y deslealtades que se vivieron dentro del bando republicano al final de la Guerra Civil. El libro se centra en las relaciones entre los tres hombres más relevantes del bando republicano: Juan Negrín, Julian Besteiro y Segismundo Casado.
Droga dura, esto no es para moñas, aquí se dicen las cosas claras. Quisiera añadir un apunte, solo hay que leer los telegramas y la mala baba con que trataban a Lehendakari Aguirre desde Madrid y como se hacia política y se ponían la zancadilla unos a otros. El PSOE después de joder y dejar desasistido el frente norte echaría la culpa a los nacionalistas y quedarían hermosos mitos como el de la traición del PNV en Santoña por rendirse ya en suelo cántabro con el frente ya roto y Bilbao caído y destruido. Aun se les escucha a fachas y sociatas usarlo como argumento y demostrando de donde nace el origen del odio patrio, de las putas entrañas del Partido que se cree centro del universo y de la incultura de los pistoleros muertos de hambre al servicio de los señoritos. Esta es la España mía, la España nuestra. Asesinos y tarugos.
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Te deja con ganas de más.
Droga dura, esto no es para moñas, aquí se dicen las cosas claras. Quisiera añadir un apunte, solo hay que leer los telegramas y la mala baba con que trataban a Lehendakari Aguirre desde Madrid y como se hacia política y se ponían la zancadilla unos a otros. El PSOE después de joder y dejar desasistido el frente norte echaría la culpa a los nacionalistas y quedarían hermosos mitos como el de la traición del PNV en Santoña por rendirse ya en suelo cántabro con el frente ya roto y Bilbao caído y destruido. Aun se les escucha a fachas y sociatas usarlo como argumento y demostrando de donde nace el origen del odio patrio, de las putas entrañas del Partido que se cree centro del universo y de la incultura de los pistoleros muertos de hambre al servicio de los señoritos. Esta es la España mía, la España nuestra. Asesinos y tarugos.