Un periodista neozelandés quiso adentrarse en el mundo de las cosquillas profesionales. Hay gente que ha dejado el trabajo y se dedica solo a eso, pero también descubrió redes de cosquillas en las que la historia no era divertida. Se presionaba a los participantes para que no salieran de ese mundo. Intentaban que solo ganasen dinero con las cosquillas, que fuera su principal fuente de ingresos, para que dependieran de ellas. Un auténtico imperio de las cosquillas basado en el dolor. La investigación es un documental, Ticked, de HBO.
Comentarios
Ni el nombre del documental ponen bien Tickled es el correcto.
"La red de cosquillas se va a barrios desfavorecidos a buscar allí a chavales que podrían dejarse hacer cosquillas más fácilmente"
Madre mía, qué perturbados.
#1 Iglesia Católica Seal of Approval.