Si no eres porfiado, olvídalo. Te dirán que no hay espacio, ni dinero, ni lectores. En vez de perder tiempo quejándote, pon el trasero en la silla como proponía Balzac. Y cuando empieces a trabajar escucha el consejo de Katherine Anne Porter: no te enredes en asuntos ajenos a tu vocación. A un narrador lo único que debe importarle es contar la historia.
Comentarios
Había leído "tronista"
#2 No por Dios
#2 Ostras, yo también y pensé ¿cómo no votan esto negativo?, hasta que leí tu comentario.
#4 pues me quedo mucho más tranquila
#2 Y yo
Había leído contratista. Tamos perdíos.
consejo número 1- piensalo bien, dedica tu talento a algo que merezca realmente la pena