Hace 7 años | Por Verbenero a labrujulaverde.com
Publicado hace 7 años por Verbenero a labrujulaverde.com

En la noche del 30 de julio de 1916 los vecinos de Nueva Jersey se despertaron por una estruendosa detonación acompañada de una sacudida muy violenta: acababan de explotar un millar de toneladas de municiones almacenadas en Black Tom, una isla artificial situada en la desembocadura del río Hudson, muy cerca de la Estatua de la Libertad, que además recibió tales daños en su antorcha que fue necesario sustituirla. Asimismo, los vitrales de la Catedral de San Patricio quedaron hechos añicos y se agrietó la pared del Ayuntamiento.