Hace 6 años | Por --546793-- a naukas.com
Publicado hace 6 años por --546793-- a naukas.com

Escuché un pitido que se repetía periódicamente con la precisión de un reloj. Tardé un tiempo, que no puedo precisar, en darme cuenta donde me encontraba: era la unidad de cuidados intensivos (UCI) de algún hospital. Lo supe cuando oí voces conocidas que se referían con alabanzas a quien se encontraba postrado en la cama, que indudablemente era yo. Debería estar agonizando pues este tipo de lisonjas eran las típicas de estas situaciones. Me sentía aturdido, pero no incómodo, mis pensamientos vagaban caprichosamente sin que pudiese tener control