Nadie se salvó de la ferocidad represora tras el golpe de 1973. Cinco sacerdotes fueron brutalmente torturados y luego masacrados. Algunos aún continúan desaparecidos. Los sacerdotes Gerardo Poblete y Miguel Woodward (chilenos), André Jarlan (francés), Miguel Llidó y Joan Alsina (españoles), son 5 víctimas de la más cruel de las dictaduras de América, la chilena, comandada por Augusto Pinochet y que contó con la complicidad de militares y civiles, que se mantiene hasta hoy.
Comentarios
#3 Entonces hablamos de crímenes.de guerra, los cuales seguro hubo, y que deben de ser juzgados como tales.
A mi es que me gusta analizar separaradamnete la guerra civil y su crímenes de guerra de la posterior represión franquista y sus crímenes de lesa humanidad
No se habla aquí de los comunistas y anarquistas que mataban curas y violaban monjas en España?
Porque sería interesante ver eso también y no sólo lo que pasó en Chile.
#1 En España se convirtieron en objetivo legítimo al apoyar y alentar la sublevación militar de palabra, logística e incluso militarmente en algunos casos.
https://es.m.wikipedia.org/wiki/Iglesia_cat%C3%B3lica_y_Guerra_Civil_Espa%C3%B1ola
Como se ve, los ataques contra la iglesia fueron consecuencia de la elección de bando y apoyo a los sublevados por esta y no al revés.
#2 No comparto tu punto de vista y tu sesgada opinión sobre el hecho, pero lo respeto.
Violar y matar monjas y parte del clero no está justificado bajo ningún concepto por el mero hecho del respeto a los derechos humanos, las monjas no se alzaron militarmente contra nadie.