Publicado hace 6 años por e.kitsune a blogs.elconfidencial.com

El bienestar de un individuo no depende esencialmente de sus ingresos del momento, sino de su acceso efectivo a los bienes y servicios que necesita para una buena vida. Al hablar de desigualdad, solemos referirnos a desigualdad de la renta: cuál es el grado de dispersión de los ingresos de una sociedad. En muchos países, la desigualdad de la renta lleva varias décadas aumentando: en EEUU, a comienzos de los noventa, la renta después de impuestos del percentil 90 era seis veces superior a la del percentil 10; hoy, es más de siete veces superior.

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#1 Ese cartel está mal. Debajo de "Chicas gratis (por lista)" debería poner "Chicos 1x8€ o 2x10€ (por lista) (por tonto)".

los12monos

Vamos a ver, tal como está contando el cuento Juan Ramón, hay que tener en cuenta que el consumo tal como se entiende en el artículo se llega a copar y a partir de ahí el excedente de renta irá a ahorro o inversión. Por eso no hay una relación directa entre desigualdad de renta y de consumo pero eso no lo hace menos injusto, al revés.

Tampoco es razonable equiparar a alguien que hace x consumo y tiene la facultad además de ahorrar con otro que necesita endeudarse para sostenerlo. Tiene implicaciones realmente opuestas aunque hablemos de una misma identidad en cifra de consumo y conlleva una afectación directa a la calidad de vida incluso en la salud.

Hay diversos estudios que indican (y es de sentido común, además, desde que se conoce la ley de oferta y demanda) que las rentas generadas en relación a la satisfacción que proporcionan describen una curva decreciente respecto a una evolución lineal a medida que aumentan. Así pues no produce el mismo efecto en ningún ámbito la diferencia entre 10.000 y 20.000 que con30.000 o que entre 20.000 y 40.000, euros, dólares o coronas suecas. Más allá de ciertas cotas la calidad de vida dificilmente puede aumentar por más que lo hagan los ingresos.

Da información correcta con un enfoque incorrecto que avale su perspectiva que es al final quitarle hierro al agravio que la evolución de la desigualdad de rentas supone. Lo que está exponiendo es en realidad un agravante:
El dinero que ganan de más los ricos no tiene para ellos ni la mitad de valor que tiene para los pobres. Por no hablar de la función mucho más sana que cumple en la economía real y no en la financiera.
¿Qué quiere dar a entender? ¿que no vamos tan mal? Pues no hombre, vamos de puta madre. De puta madre.
De verdad es para hacérselo mirar.