El problema es que este repliegue individualista suponga un nuevo paso hacia la desaparición del espacio común que hace posible la conversación pública. Un síntoma alarmante de la fatiga democrática.
La fatiga democrática no es por leer, sino porque después de haber leído, estar informado y protestar nuestra vida en la democracia ha ido convirtiéndose, cada vez más, en una putísima mierda. De qué sirvió leer periódicos.
Ahora no hay democracia, si, votamos, sale un representante, pero hace lo que le sale del ... Miente, beneficia a los suyos descaramente, se hacen leyes para protegerse, nos complican la vida a los demas con burocracia para hacernos buestra vida mas dificil y trabaja para quien le paga, que muchas veces parece que no son todos los electores, incluidos sus votantes.
Yo lo veo como una oligocracia electoral, nos van cambiando la cara del elegido pero todo sigue igual... con sus lobbys bien atendidos y a los demás nos complican la vida par que no tengamos manera de protestar
Una votación no hace que haya democracia, esto es una obra de teatro mala, con un presupuesto disparatado y con un final malo, vamos, un dramón.
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La fatiga democrática no es por leer, sino porque después de haber leído, estar informado y protestar nuestra vida en la democracia ha ido convirtiéndose, cada vez más, en una putísima mierda. De qué sirvió leer periódicos.
Ahora no hay democracia, si, votamos, sale un representante, pero hace lo que le sale del ... Miente, beneficia a los suyos descaramente, se hacen leyes para protegerse, nos complican la vida a los demas con burocracia para hacernos buestra vida mas dificil y trabaja para quien le paga, que muchas veces parece que no son todos los electores, incluidos sus votantes.
Yo lo veo como una oligocracia electoral, nos van cambiando la cara del elegido pero todo sigue igual... con sus lobbys bien atendidos y a los demás nos complican la vida par que no tengamos manera de protestar
Una votación no hace que haya democracia, esto es una obra de teatro mala, con un presupuesto disparatado y con un final malo, vamos, un dramón.