Hace 6 años | Por Asther a hipertextual.com
Publicado hace 6 años por Asther a hipertextual.com

Reed B. Bontecou disparó como nadie durante la Guerra Civil estadounidense. Entre mayo de 1864 y el final de la contienda, en 1865, fue el responsable de centenares de disparos lanzados por él mismo o sus subalternos. La inmensa mayoría tenían como objetivo soldados y se ejecutaron con precisión milimétrica entre las paredes del Harewood General Hospital de Washington. Ninguno de esos “tiros” dejó heridos, ni muertos. Si a su paso quedaron viudas o huérfanos fue solo por las lesiones que habían padecido antes los combatientes.