Por David Uclés. Hacía 18 años que no me confesaba, desde que me expedí a mí mismo el carnet de agnóstico; hasta esta mañana. Vine a Barcelona a pasar unos días, y a buscar ejemplares de Pere Calders. Deambulando por sus calles, justo en el momento en el que le hablaba a un amigo del patrón de los escritores, san Francisco de Sales, vimos una iglesia dedicada a él. Y hoy fui a visitarla. Mi amigo ni se lo planteó...
|
etiquetas: libros , david ucles , religion , gay