Beethoven adoraba a un escritor que, más de veinte años mayor que él, había ocupado su mente desde adolescente, un autor al que consideraba el más grande de su tiempo y al que intentó conocer personalmente en diversas ocasiones, de modo especial a través de una amiga común, Bettina Brentano, que intentó en varias ocasiones el acercamiento hacia Goethe de parte de Beethoven.
Comentarios
Un encuentro entre genio con genio debe ser algo así como lima contra lima.