Hace 10 años | Por fantomax a metode.cat
Publicado hace 10 años por fantomax a metode.cat

Una etnobotánica polifacética que iba de alimentos a juegos, de instrumentos cinegéticos a musicales, de rituales de tránsito entre etapas vitales a la confección manual de ornamentos. De una forma u otra, el ojo vivo del niño hambriento, los dedos del chiquillo falto de complementos dietéticos, las fuertes mandíbulas ávidas de motivos para activarse o la atrevida inconsciencia estimulada por el rumor de los intestinos han encontrado en el mundo vegetal unos recursos cuyo balance energético no se aconsejaría para los adultos, por su mayor peso.