Publicado hace 2 años por Thornton a nationalgeographic.com.es

Gracias a la fotografía podemos congelar un momento en el tiempo. Instantes que solo ocurren una vez en la vida y que nos permiten apreciar decenas de matices que de otra manera pasarían desapercibidos. De cara a captar estas emociones, la habilidad fotográfica es clave, así como la cámara con la que se trabaja.