¿No habéis sentido nunca esa horrible sensación, esa grima al escuchar a alguien crujir sus nudillos o chasquear los dedos, crujir los codos o las rodillas? Hay personas que tienen una enorme facilidad para producir estos molestos ruidos bioacústicos y, en cambio, a otras les resulta extremadamente difícil y desagradable. Incluso a algunos descerebrados les gusta hacerlo y disfrutan torturando al resto de mortales. Merecen morir con infinito dolor...
Comentarios
Aparte de cansina, spam.
¡Vaya! Parece que necesita clicks y ha levantado el veto a MnM.
¡Ay estos yonkis de EgoPlus!