El doctor Heath estuvo varias semanas buscando el sujeto perfecto. Así encontró al sujeto 19, como lo denominó, un joven de veinticuatro años que se quejaba de «alteraciones en su capacidad para experimentar placer». El investigador decía haber descubierto que, además de un centro de placer, el cerebro tenía un «sistema aversivo», algo así como un centro de castigo. De esta forma, con la estimulación de las regiones decía que podía «convertir» a cualquiera. Es más, se jactaba de que podría volver a una persona temporalmente en un homicida, o...
Comentarios
Muy interesante, me ha recordado la novela "Exhibición impúdica" de Tom Sharpe en donde el jefe de policía, sudafricano, coloca a sus subordinados, en tandas de cien, con electrodos en los genitales y les proyectan fotos pornográficas de mujeres negras. Cuando se empalman les dan descargas eléctricas en sus partes pudendas.
Bastante alucinante, parece ciencia ficción. Aquí la primera parte: La habitación del placer que no hemos vuelto a abrir (1)
La habitación del placer que no hemos vuelto a abr...
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