Desde que los primeros trenes hicieron su aparición, las piedras no han dejado de acompañarlos. Hay que tener en cuenta que los trenes tienen que enfrentarse diariamente a la expansión y contracción debida al calor, al movimiento, a la vibración del suelo, al crecimiento de la maleza, a la acumulación de agua debida a las lluvias… Un polinomio terriblemente complejo que tiene una derivada final: mantener un ancho constante y que no se deforme.
Te ahorro un clic: "El lecho de piedras que se coloca en el terreno y la vía de los trenes proporciona la estabilidad que se precisa para distribuir las cargas de forma uniforme y mantener la estabilidad"
Comentarios
Te ahorro un clic: "El lecho de piedras que se coloca en el terreno y la vía de los trenes proporciona la estabilidad que se precisa para distribuir las cargas de forma uniforme y mantener la estabilidad"
Pues depende de su tamaño, las pequeñas son para que no descarrile, las grandes son para que descarrile.
Este tipo de piedras no absorben el agua, por esto no se ve verdín nunca en las vías.