La historia nunca se repite siguiendo el mismo guion. ¿Se parece en algo nuestra situación actual a la de aquellos turbulentos años treinta en Alemania?
#2
Por aquel entonces había un Partido Comunista en Alemania que fue ganando en fuerza frente a partidos más grandes como el SPD o el nazi. Me refiero sobre todo a las elecciones de 1932, las dos que hubo antes de las amañadas del 33.
El SPD un partido poco confiable para la clase obrera, como ahora el PSOE en España
Pero a día de hoy no tenemos aquí un Partido Comunista coherente y fuerte.
De modo que los paralelismos son más bien escasos.
Ni siquiera la España de ahora se parece a la España de la II República, donde había más analfabetismo que ahora, pero mucha más conciencia social.
En aquella época, en España, había un primo. El de Rivera. Un tonto que se creía el Mussolini español pero que en realidad no contaba para nada, que organizó una marcha del millón de hombres a la que solo acudieron sus colegas. Acabó siendo un pelele del fascismo.
Puestos a buscar paralelismos, ahí lo dejo.
Comentarios
Creo que comparar hechos historicos con el espectaculo bochornoso de dos petimetres durane esta semana , está fuera de lugar
#1 la he enviado, no por el espectáculo de nuestros políticos, sino por la situación actual económica, política y social en el mundo desarrollado.
#2
Por aquel entonces había un Partido Comunista en Alemania que fue ganando en fuerza frente a partidos más grandes como el SPD o el nazi. Me refiero sobre todo a las elecciones de 1932, las dos que hubo antes de las amañadas del 33.
El SPD un partido poco confiable para la clase obrera, como ahora el PSOE en España
Pero a día de hoy no tenemos aquí un Partido Comunista coherente y fuerte.
De modo que los paralelismos son más bien escasos.
Ni siquiera la España de ahora se parece a la España de la II República, donde había más analfabetismo que ahora, pero mucha más conciencia social.
#2 Comparar la situación actual con la de la república de Weimar me parece absolutamente exagerado.
En aquella época, en España, había un primo. El de Rivera. Un tonto que se creía el Mussolini español pero que en realidad no contaba para nada, que organizó una marcha del millón de hombres a la que solo acudieron sus colegas. Acabó siendo un pelele del fascismo.
Puestos a buscar paralelismos, ahí lo dejo.