Hace 8 años | Por Mirlowsky a blogs.publico.es
Publicado hace 8 años por Mirlowsky a blogs.publico.es

La vida de todo primogénito es un camino de rosas hasta que llega el momento de hacerle un hueco al siguiente hijo. Históricamente y salvo asombrosas excepciones, los hermanos están condenados a tener más de un rifirrafe entre ellos.

Comentarios

H

A mi hermano que no lo toque nadie. Bueno...yo.

Mirlowsky

#1 lol