Desde la perspectiva del contexto histórico, las tres grandes producciones con el simio gigante Kong como protagonista son algo más que simples películas de terror y aventuras. La primera, de 1933, se enmarca en la Gran Depresión reflejada en el argumento- y el ascenso del nazismo; la segunda, de 1976, en la crisis del petróleo que puso fin a treinta años de bonanza posbélica y también queda patente en el guión; la tercera, de 2005, retoma el planteamiento de la primera pero mostrándolo de forma aún más cruda.
Comentarios
Las primeras versiones de las películas son siempre más o menos buenas, pero las siguientes son cada vez más y más merdosas.
Pues la siguiente, Kong isla calavera me parece un autentico espectáculo en todos los sentidos, ya la podrían haber incluido en el análisis. La de Jackson adolece de ser demasiado larga, había partes soporíferas que no aportaban absolutamente nada.
#2 malas costumbres (hobbits) adquiridas...
#3 las de los hobbits no las considero ni películas 😂
#4 me refiero a El señor de los anillos , aprendió de los hobbits el segundo desayuno, a fumar hierba en pipa y a hacer películas muy largas.