Hace 3 años | Por --641639-- a ramonmayrata.com
Publicado hace 3 años por --641639-- a ramonmayrata.com

En agosto de 1803 actuó en Madrid un hombre que aseguraba poder resistir la acción del fuego sin quemarse. Ofreció una única sesión privada en casa de D. Francisco Antonio Zea en la que tocó con los pies desnudos tres hierros al rojo vivo, los tomó en sus manos hasta enfriarlos y, una vez calentados de nuevo, los pasó por su lengua. Después hundió las manos en aceite hirviendo, con el que se lavó la cara y enjuagó la boca.

Comentarios

D

Entonces entiendo que solo ofreciera una única sesión...