Google quiere construir una start-up de humanistas y hacer del humanismo un producto de consumo. Este artículo aboga por lo contrario y llama al estrado a Erasmo de Róterdam, Johann Huizinga y a algunos intelectuales que predijeron la decrepitud del sistema pedagógico de las Humanidades.
Comentarios
El humanismo no me gusta, pero la adicción al economicismo o a la deshumanización tecnológica menos.