Sin embargo, subvencionar el precio del transporte público a los jóvenes podría producir otros efectos. Por ejemplo, las víctimas¹ de accidentes de tráfico podrían reducirse al aumentar la cantidad de jóvenes que usan el autobús o el metro en lugar de sus vehículos particulares. O el consumo de alcohol podría incrementarse al ser más asequible viajar en transporte público (donde beber alcohol no está penalizado) que conducir un coche privado (donde ir bebido aumenta el riesgo de tener un accidente y existe sanción económica).
Comentarios
Los accidentes de tráfico nunca han importado cuando hay que poner pasta. Como los suicidios.
Mucha hipocresía porque las marcas con el pretexto de la seguridad cada vez te meten más electrónica y alarmas que muchas veces lo único que hacen es distraerte y sobre todo encarecer los coches
La curva de laffer. Bajas el precio del búho, subes la recaudación en impuestos especiales de alcohol
In your face!