En los siglos XVI y XVII el arte español tuvo en la fugacidad de la vida uno de sus temas más destacados, plasmando el concepto en impactantes imágenes de cadáveres en descomposición que, escenificaban la idea de que nadie podía escapar de la muerte, ya fuera rico o pobre. El escultor Gil de Ronza hizo una de las obras más impresionantes de ese tipo
Comentarios
La he visto hace poco y el detalle de los gusanos es curioso.
El museo muy recomendable por cierto.
Muy apropiada escultura para estos tiempos virulentos.