Sólo un maestro como Stanislaw Lew es capaz de recrear, de una forma tan densa y a la vez tan liviana, un relato de ciencia ficción tan detallado, tan específico en circuitos robóticos y campos electromagnéticos, conjugado con las conexiones neuronales humanas y las insondables reacciones de eso que, dicen, es el alma del ser humano.
Esta obra, que no está habitualmente considerada entre las clásicas o mejores de la ciencia ficción, es para mi una de las mejores, y que más me impactó cuando la leí.
La capacidad de hacerte empatizar con el sentimiento de soledad del protagonista está genialmente lograda, una vez que empiezas a leerla tienes que acabar de un tirón.
Grande Lem
Comentarios
Esta obra, que no está habitualmente considerada entre las clásicas o mejores de la ciencia ficción, es para mi una de las mejores, y que más me impactó cuando la leí.
La capacidad de hacerte empatizar con el sentimiento de soledad del protagonista está genialmente lograda, una vez que empiezas a leerla tienes que acabar de un tirón.
Grande Lem
¡Maravilloso Stanislaw Lem!!