Los romanos se enorgullecían de no utilizar jamás el engaño. De encarar las batallas a pecho descubierto, espada en mano, dispuestos a superar a sus bárbaros enemigos con la potencia de su virtuosa civilización. Pero, en la práctica, el espionaje y los ardides formaban parte del alma de Roma.
Octaviano, transformado en Augusto, creó un servicio postal y de mensajeros llamado cursus publicus, una de las invenciones más destacables a nivel comunicativo en la antigua Roma. Además, impulsó un servicio de cartografía notable.
También inventaron correos y el I.G.N. Para que luego digan que no le debemos nada a estos romanos.
Ya decía sun Tzu que los espías son fundamentales tenerlos entre el enemigo y entre tus tropas para detectar infiltrados.
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Seguro. Y EEUU no negocia con terroristas, los financia
Octaviano, transformado en Augusto, creó un servicio postal y de mensajeros llamado cursus publicus, una de las invenciones más destacables a nivel comunicativo en la antigua Roma. Además, impulsó un servicio de cartografía notable.
También inventaron correos y el I.G.N. Para que luego digan que no le debemos nada a estos romanos.
Ya decía sun Tzu que los espías son fundamentales tenerlos entre el enemigo y entre tus tropas para detectar infiltrados.