Vivir en el puerto en verano es lo normal entre pastores. Lo que ya no lo es en absoluto es que Sánchez, de 44 años, haya realizado la trashumancia a pie hasta aquí desde su pueblo: Huertas de Ánimas –una pedanía de Trujillo (Cáceres)–. Son en torno a 500 kilómetros, que Sánchez, su familia, una docena de perros y una mula recorrieron en primavera, durante 39 jornadas, durmiendo al raso y atravesando unas cañadas cada vez menos preparadas para el objeto con que habían sido concebidas y protegidas por ley
Comentarios
El chiste de Maxi, el joven pastor alemán, se escribe sólo
Eso sí que es hacer el camino, y no el de Santiago.
Si fuese en bici iría el primero
Y los gastos, si queremos que siga existiendo la trashumancia, solo se cubren de una forma: si la gente consume carne de cordero y lana de oveja.
Las dos cosas me parecen bien.
Podría hacerlo en tren, pero tardaría más.
#4 Si lees el artículo, sabrás que Renfe dejó de prestar ese servicio en los 80.