Marta Tafalla (Barcelona, 1972) ha lanzado un libro-reflexión sorprendente en los tiempos que corren: ‘Ecoanimal. Una estética plurisensorial ecologista y animalista’ (Plaza y Valdés, 2019). Es doctora en Filosofía y profesora de la Universitat Autònoma de Barcelona. Es, no obstante, una filósofa diferente: una filósofa que piensa sobre la naturaleza, los animales y la biosfera. Por lo tanto, sus reflexiones son ideales para analizar las causas de fondo de esta pandemia del coronavirus: la degradación de los ecosistemas, la extinción de...
Comentarios
Seguro que estoy de acuerdo con ella, pero iba leyendo la entradilla y a la mitad ya estaba doblado de cansancio...
#2 Eso probablemente diga más sobre quien lo lee que sobre quien lo escribe...
#3 a veces algunos de esos académicos escriben textos muy opacos para algo que debería ser más accesible.
Eso es lo que da fatiga
#4 A veces para articular y discutir ideas complejas, es necesario utilizar una terminología especializada.
Que luego encima, al mismo tiempo, se llega a decir que los escritos de humanidades son muy complejos y no hay quien los entienda, y que las carreras de humanidades son facilísimas y no tienen mayor complejidad. Con el añadido de que, por lo que sea, parece que a las humanidades muchas veces se les deniega o se les reprocha la utilización de un lenguaje especializado cuando, por ejemplo, a un ingeniero nadie le pide que se deje de términos enrevesados y que tiene que explicarse siempre para que lo pueda entender todo el mundo...
#5 el problema es utilizar un lenguaje opaco de forma innecesaria en escritos dirigidos a un público más amplio.
En Ciencia eso está muy interiorizado. Un paper es doloroso de leer, pero si te vas a un libro o revista de divulgación el lenguaje es otro
#6 Es que ahí igual no tienes en cuenta que las vías de comunicación académicas tradicionales de las humanidades no son sólo los artículos, sino también los libros, y los capítulos de libro. Por desgracia, eso es algo que se impone y que sufrimos desde ciertas agencias evaluadoras, que a veces evalúan un capítulo de libro o libro muy por debajo de un artículo. Porque parece que consideran lo primero como divulgación (y no, no suele serlo, sigue siendo literatura especializada), y lo segundo como contenidos verdaderamente académicos en sí.
Las humanidades no son divulgación, aunque mucha gente lo asuma. Pueden tener contenidos de divulgación, como otras disciplinas, pero no lo son por defecto. Y sin embargo, debido a la creencia errónea de que todo lo que provenga de las humanidades es divulgación, a las humanidades se les exige que todo se simplifique y se escriba y se lea como divulgación. Cuando esto tiene el mismo (nulo) sentido que exigirle a los papers científicos que puedan ser leídos por un público amplio. Que luego te puedes encontrar con científicos, que serán muy top en lo suyo, que por desgracia comparten ese tipo de prejuicios, y pretenden colarte un paper descriptivo-divulgativo en una revista especializada de humanidades. Porque están convencidos de que las humanidades son eso y sólo eso. Y no, ni mucho menos.
Eso por un lado. Y por el otro, hablar de este tipo de cosas en un hilo sobre un libro de Marta Tafalla, que suele escribir sobre contenidos de la historia de la filosofía de una manera más que asequible, es bastante paradójico...
... especies salvajes y la transmisión del virus de los animales a los humanos. Su gran pregunta ética es por qué los humanos tratamos a los animales como nuestros esclavos y de manera tan violenta, agresiva y alienante; y las conclusiones hacen daño. “Los humanos creemos que dominamos la Naturaleza, pero somos una especie próxima al colapso”, alerta. - En el libro ‘Ecoanimal’ empiezas explicando una cosa que me sorprendió mucho: naciste sin sentido del olfato. - Sí, pero me sorprende que la mayoría de gente, incluso algunos médicos, me han dicho siempre que no pasa nada por no tener olfato porque es un sentido que los humanos ya no usamos mucho… No se dan cuenta de que, cuando no tienes olfato, no puedes detectar si una camiseta huele mal, no sabes si hay un escape de gas en la cocina, no detectas que hay un incendio cerca de ti…