En el norte del país que adhirió a la cristiandad primero que ninguno, Etiopía, once monumentales estructuras talladas en piedra que se incrustan en el suelo son un testimonio increíble de la relación de esta nación con la religión. Y un misterio igual de profundo.
Comentarios
Ya podrán ya. Llevando unas alas bien puestas, qué se quiten escaleras y andamios...Y fijo que encima padefos.
#1 ese "qué" no lleva acento, inculto
¡Muy interesante!