Hace 2 años | Por japego a elmundo.es
Publicado hace 2 años por japego a elmundo.es

Fue Lyotard, filósofo y posfilósofo, el que se puso a pensar el deseo y exigió una mutación radical de la posición desde la que se desea. No se trata sólo de cambiar el objeto de deseo sino el modo mismo de desear. Importa, o debería importar, no sólo lo que se quiere sino cómo se quiere. Él apuntaba alto y su idea era transformar nuestra relación con lo político, lo laboral y hasta lo personal. Y ya que estamos en el Festival de Venecia cabría añadir lo cinematográfico.