Durante los tres mil años de historia faraónica, el título de soberano de las Dos Tierras recayó casi siempre en manos masculinas. Pero en algunas ocasiones el faraón no fue un hombre, sino una mujer que normalmente alcanzó el trono en períodos de regencia, y en tiempos convulsos o de vacío de poder.

Comentarios

tiopio

Las faraonas.