En 1942, cuando aún parecía que las fuerzas del Eje podían ganar la II Guerra Mundial, 3.000 jinetes charros desfilaron en Ciudad de México bajo el mando de Antolín Jiménez Gamas. Se trataba de la avanzadilla de la Legión de Guerrilleros Mexicanos, un esperpéntico ejército que pretendía plantar cara al ejército nazi ante una eventual invasión de México por parte del III Reich.
Comentarios
Los salmantinos son un poco secos pero cuando la lían...
#1 ¡Y qué bien nos sienta el sombrero mejicano...!
Había leído "charos".