Antes de su medicalización a finales del siglo XIX, los celos fueron una pasión tan confusa que muchos médicos se quejaban del poco interés que su estudio había despertado en la psicología, la psiquiatría o la medicina legal. Fue sólo a comienzos del siglo XX cuando estas emociones complejas comenzaron a vincularse de manera exclusiva a las pasiones del corazón, y más en concreto, a las sufridas por quienes se sentían engañados por sus parejas.
Comentarios
Los celos sólo afectan a las mujeres. Cuando un hombre muestra un comportamiento similar no son celos, es machismo.