En la subida a Lepoeder, yo he visto a peregrinos doblados bajo mochilas enormes; he visto a coreanos con dos botellas de litro y medio, atadas una a cada lado de la cintura...
En el albergue de Roncesvalles había montones de libros abandonados por peregrinos. Abundaban los tochos de Paulo Coelho y Dan Brown y Jorge Bucay y autores llenos de energías y felicidad y luces y cúpulas y los nueve tralarí.
Se tienen que preparar la cabeza para actuar como vcas.
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En el albergue de Roncesvalles había montones de libros abandonados por peregrinos. Abundaban los tochos de Paulo Coelho y Dan Brown y Jorge Bucay y autores llenos de energías y felicidad y luces y cúpulas y los nueve tralarí.
Se tienen que preparar la cabeza para actuar como vcas.
Me permito la licencia del título con las incorrecciones evidentes porque viene del twitter del autor.