Encapuchados, martillos, piedras. Inmediatamente su nombre se hizo famoso: el «Cojo» Manteca, en realidad Jon Manteca Cabañes, entonces con tan solo veinte años, que sobrevivía pidiendo en la calle y que el periodista Jesús Quintero, en aquella gloriosa serie de entrevistas, interrogó sobre sus ideas: «No creo en el futuro. Solamente quiero marcha», confesó riéndose mientras no paraba de fumar y beber en una entrevista en la que aportó algunos datos sobre su vida.
Comentarios
#3 Es que has sacado el tema de Pdemos.
Hoy seria un referente para Podemos y meneame y habria sido entrevistado en la tuerca
#1 ¿estas seguro de eso?.
Ahora mas bien, nadie daría un duro por él, sería simplemente un marginado de condena en condena y desahuciado de cualquier mínimo de vida digna. O bien lo contrario, un referente de rebeldía y sociedad fracasada, estrella televisiva del prime time que alimentaria el ego y la voracidad mediatica, sucumbiendo poco a poco en el olvido y subsistiendo de su efímero exito hasta perecer en su ostracismo .
(aunque eso como otras muchas cosas de la realidad que te rodea te importa una mierda, por lo que deduzco)
#2 Mucho deduces , no escribo mas para que no te montes una pelicula muy larga