Se dice que su madre tuvo una relación extramatrimonial con el führer. Se dice que se aprovechó de ella obligándola a actuar en películas desde muy pequeña. Se dice también que cuando fue a Madrid al estreno de La panadera y el emperador hubo tal tumulto que se rompieron los cristales de la puerta del cine. Se dice que el pueblo alemán la acusó de traición tras obtener la nacionalidad francesa. Se dice que se suicidó por una profunda tristeza. Es posible que todas esas cosas sean verdad, pero también es posible que casi todas sean mentira.
Comentarios
Me ha parecido interesante tanto el planteamiento de esta película, como lo chocante que resulta pensar en cómo trataron a Romy Schneider en su momento.
El colmo de los colmos, el tratamiento que tuvo de la prensa cuando murió su hijo, un examante que se presenta en el hospital para hacerse una foto con su cadáver (y se lo permiten), o que el juez se negara a autorizar una autopsia para no perjudicar a su "mito"... (!!!)