Columna de Trajano El corazón de un buque de guerra romano era su tripulación, un conjunto diverso de individuos que, juntos, daban vida al barco.La composición de la tripulación era un reflejo de la estructura social romana, con funciones y responsabilidades que reflejaban las jerarquías y divisiones del imperio.Al frente de esta intrincada red de deberes estaba el navarca, o capitán del barco. A quien se le confiaba el mando general, el navarca era responsable de la navegación, la estrategia y de garantizar el bienestar (...)
Comentarios
Nunca decepciona.
Si en esa época eras un puto pijo repeinado galopante irreversible sentado en la poltrona de mando pues estaba bien la cosa marina, pero si eras un puto motor de barco lo pasabas peor. Si te fallaban las bujías te las reparaban a base de latigazos:
Los romanos no tenían ordenadores, pero había mucho HP.