Hace 3 años | Por Asther a jotdown.es
Publicado hace 3 años por Asther a jotdown.es

Bruselas, 1873. Apenas alcanza la treintena, pero un demacrado Paul Verlaine siente sobre sí el peso de una vida que amenaza con aplastarlo. Reputado intelectual, hombre de buen apellido, afamado burgués, casado en felices nupcias. Todos estos rasgos, uno por uno, desaparecen al otro lado del retrete en el que se ha convertido su futuro. No hay París que soporte su intelectualidad, ni apellido que lo etiquete con dignidad. La burguesía lo desprecia, Y su mujer, Mathilde, se largó antes de la penúltima paliza.