¡Estoy más aburrido que una ostra! Esta coloquial expresión la utilizamos para despreciar un estado muy especial de ánimo relacionado, básicamente, con el tedio y el hartazgo que genera la inactividad. Sin embargo, no responde a la realidad biológica de esos bivalvos. De hecho, y muy en contra de lo que su tranquila apariencia indica, las ostras esconden un pasado aventurero de lo más sorprendente.
Comentarios
Berberechos, almejas y chirlas salen de noche de fiesta , simpre con navaja, porsiaca se acerca un pulpo.
#1 Anda poeta súbete la bragueta