Esta es la historia de una señora de 116 años que vive en un asentamiento gitano. El ayuntamiento se ofreció a darle un piso valorado en 600.000 euros con la posibilidad de que también pudiera ocuparlo su hija siguiendo unas condiciones, pero su familia lo ha rechazado porque «no responde a sus reivindicaciones» ... «aparte del reducido tiempo por el que se la ofrecen (5 años prorrogables), tendrían que hacerse cargo de dar de alta los suministros de luz y agua, además de amueblarla». ¿Se puede tener más morro?
Comentarios
Ooops, se me ha ido la pinza. Son seis meses prorrogables, no cinco años (eso me pasa por fiarme de la radio).