La noche del 23 de junio un Ford Fiesta de color gris volcaba en la autopista AP-7 a la altura de Corbera, Valencia. En su interior, dos hombres y una mujer. Los viajantes habían salido un día antes de viaje desde Marostica, al nordeste de Italia, y no pensaban parar hasta llegar a Marruecos. Sin prisa, pero sin pausa, para ocultar un rapto y una historia de malos tratos. Una historia que truncó el asfalto. Una bocanada de libertad para una mujer.
Comentarios
-siempre según el relato realizado por Irina ante la Guardia Civil-
Vale que por las lesiones, parece que es cierto, pero eso no lo ves hasta la ultima linea. En el resto del texto, ni un presunto ni nada por el estilo.
Ni meneo ni voto negativo.
Se salvo de morir apedreada en su tierra natal. Que salvajes...