Hace 11 años | Por Enrique_Carrata... a rubenalonso.es
Publicado hace 11 años por Enrique_Carratalá a rubenalonso.es

Dada la dificultad para encontrar un puesto de trabajo estable y más del teletrabajo, el primer sentimiento que corre por las venas es el de gratitud, pero en el sentido de deber algo. Por supuesto que ser agradecido es de bien nacidos, pero que eso no te convierta en un esclavo del que te brindó el teletrabajo. Y es que muchas veces se ofrece como un regalo al trabajador incluso a sabiendas de que tanto el empleado como el empleador salen muy beneficiados con esta modalidad.