La condesa de Bombay, nuestra querida Esperanza Aguirre, está preocupada y asustada con el escándalo del que fuera su vicepresidente, Francisco Granados, alias 'granizados'. Relacionada Criticar a Aguirre sale más caro en el PP que tener una cuenta millonaria en Suiza
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" Hace sólo unos días estaba Aguirre diciendo que Rajoy no podría meter su ‘divino dedo’ en el PP de Madrid, y ahora es a Aguirre a la que no le llega la camisa al cuello, y la que se ha quedado muda sobre Granados por miedo a que el pájaro pinto se ponga a cantar. Por eso el PP de Madrid no se atreve a echarlo ni a abrirle un mero expediente, no vaya a ser que el tal ‘granizados’ acorralado se disponga a confesar todo lo que sabe y algo más que se podría inventar.".Va a ser eso
Granados no tiene güebos para enfrentarse a la lideresa. Se dejará pisar el cuello antes. Ya lo está haciendo.