Talar hectáreas de pinar protegido para construir residencias de lujo, hoteles y campos de golf no le costó su sillón de alcalde, todo lo contario, revalidó su mayoría absoluta y sumo dos concejales más. El pobre alcalde asegura que “han echado encima de nosotros mucha basura y hemos sufrido muchos ataques políticos y panfletos ensuciando nuestra imagen”. Panfletos como todos los diarios de tirada nacional, supongo.
Comentarios
El pueblo cambia el verde del bosque por el color de los euros.
Algún día, con la naturaleza moribunda, nos alimentaremos de billetes.
La culpa es de los que le votaron.