Carlos cura de Vallecas, compareció ante la justicia injusta de ese Tribunal, acusado de dar cobijo en su iglesia a unos sindicalistas ilegales. Le acompañaron Manuel y Elisa Lamas en el juicio, la cual espetó al presidente del juicio estas palabras: “Ustedes pueden condenar a mi cuñado o absolverlo. Espero la sentencia. Pero lo que no aguanto ni un minuto más es quedarme parada ante esta mesa presidida por un crucifijo. Soy católica practicante y no tolero que un crucifijo se utilice en este tipo de juicios. ¡Así que me lo llevo!”Y se lo llevó
Comentarios
Curiosa anécdota, una mujer muy valiente.
Por otra parte, el "periodísta" que firma el artículo, en 1973 aún era miembro del Opus Dei
Yo soy ateo y los tolero en todas partes. Quiero decir que me jodo y me aguanto (que es lo que significa tolerar) no que me guste verlos. Al contrario.
Bien por ella.
#1 Yo no. Según sus propias creencias, no eres bienvenido. Yo trato a la gente igual que me trata a mí.
La biblia está llena de burradas como para encima "respetar" sus locuras.