Querellas por decisiones arbitrarias, retrasos injustificados, connivencia con las partes, intentos de dilatar el proceso por parte de los acusados, o incluso casos comunes que afectan a algún juez, unido en ocasiones a la falta de medios o su derroche... se ciernen sobre jueces que llevan importantes casos en los juzgados españoles, a veces mermando la eficiencia del sistema judicial, a veces cuestionando su eficacia.
Comentarios
Si funcionó con Garzón, dirán, probemos suerte con los demás.