El presidente del Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca dice que para EE UU es vital NO elevar su techo de deuda. Austan Goolsbee ha pedido por televisión que los republicanos reflexionen para evitar lo que sería una "catástrofe".
Austan Goolsbee: Si elevamos el techo de la deuda provocaríamos el primer default por pura locura
Hay, al parecer, sólo dos cuestiones importantes que tienen un plazo establecido para la arriesgada política entre la Casa Blanca y los republicanos del Congreso. Los recortes fiscales de Bush le dan una interesante dinámica de año electoral cuando aún restan dos años para finalizar el mandato de Obama. Mucho antes de ello, sin embargo, el presidente tendrá que persuadir a los líderes republicanos de ignorar insistencia del Tea Party para permitir que el techo de la deuda se aumente.
Esta cuestión sería el primer tema de la agenda para la primavera. Hasta ahora la administración ha estado (o tal vez que expresa la sensación de estarlo) segura de sí misma que el límite máximo se incrementará, pero el domingo su retórica fue notablemente más nítida.
En una aparición por TV, en la cadena ABC, en el programa "This Week", Austan Goolsbee, el presidente del Consejo de Asesores Económicos, expuso las implicaciones bastante alarmantes que se producirían en el caso que los Estados Unidos incumpla sus obligaciones, mientras se hacía la pregunta: ¿Qué tipo de locura quiere persuadirnos a nosotros para hacer esto?
"Bueno, me duele incluso hablar de esto. No es un juego. Ya sabes, el techo de la deuda no es algo para jugar. Si elevemos ese techo de deuda, esecialmente significaría el default de nuestras obligaciones, que es algo totalmente sin precedentes en la historia de Estados Unidos. El impacto sobre la economía sería catastrófico. Esa sería la peor crisis financiera económica que cualquier otra cosa que vimos en 2008".
"Cuando digo que no es un juego, no veo por qué alguien esté hablando de jugar a la gallina con el límite máximo de la deuda. Si llegamos al punto en el que dañamos la confianza plena y el crédito de los Estados Unidos, sería la primera quiebra de la historia causado por pura locura. No habría ninguna razón para nosotros entrar en default por esta especie de juego. Ni siquiera deberíamos estar discutiendo esto. La gente tiene una idea equivocada. Los Estados Unidos no está en peligro de default. No tenemos problemas con eso. Esto nos estaría agrupando con una serie de países a lo largo de la historia, y yo no creo que nos gustaría estar agrupados con ellos".
La buena noticia para Goolsbee y el presidente de la Cámara es que el liderazgo del Partido Republicano parece encarar el debate del límite máximo de déficit, un poco diferente a sus correligionarios entrantes del Tea Party, al igual que la creación intelectual del Partido Republicano, incluyendo a George Will, que, a raíz de [las declaraciones de] Goolsbee por la cadena ABC, criticó la idea de incumplimiento, simplemente por razones simbólicas.
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Traducción del artículo al español:
Austan Goolsbee: Si elevamos el techo de la deuda provocaríamos el primer default por pura locura
Hay, al parecer, sólo dos cuestiones importantes que tienen un plazo establecido para la arriesgada política entre la Casa Blanca y los republicanos del Congreso. Los recortes fiscales de Bush le dan una interesante dinámica de año electoral cuando aún restan dos años para finalizar el mandato de Obama. Mucho antes de ello, sin embargo, el presidente tendrá que persuadir a los líderes republicanos de ignorar insistencia del Tea Party para permitir que el techo de la deuda se aumente.
Esta cuestión sería el primer tema de la agenda para la primavera. Hasta ahora la administración ha estado (o tal vez que expresa la sensación de estarlo) segura de sí misma que el límite máximo se incrementará, pero el domingo su retórica fue notablemente más nítida.
En una aparición por TV, en la cadena ABC, en el programa "This Week", Austan Goolsbee, el presidente del Consejo de Asesores Económicos, expuso las implicaciones bastante alarmantes que se producirían en el caso que los Estados Unidos incumpla sus obligaciones, mientras se hacía la pregunta: ¿Qué tipo de locura quiere persuadirnos a nosotros para hacer esto?
"Bueno, me duele incluso hablar de esto. No es un juego. Ya sabes, el techo de la deuda no es algo para jugar. Si elevemos ese techo de deuda, esecialmente significaría el default de nuestras obligaciones, que es algo totalmente sin precedentes en la historia de Estados Unidos. El impacto sobre la economía sería catastrófico. Esa sería la peor crisis financiera económica que cualquier otra cosa que vimos en 2008".
"Cuando digo que no es un juego, no veo por qué alguien esté hablando de jugar a la gallina con el límite máximo de la deuda. Si llegamos al punto en el que dañamos la confianza plena y el crédito de los Estados Unidos, sería la primera quiebra de la historia causado por pura locura. No habría ninguna razón para nosotros entrar en default por esta especie de juego. Ni siquiera deberíamos estar discutiendo esto. La gente tiene una idea equivocada. Los Estados Unidos no está en peligro de default. No tenemos problemas con eso. Esto nos estaría agrupando con una serie de países a lo largo de la historia, y yo no creo que nos gustaría estar agrupados con ellos".
La buena noticia para Goolsbee y el presidente de la Cámara es que el liderazgo del Partido Republicano parece encarar el debate del límite máximo de déficit, un poco diferente a sus correligionarios entrantes del Tea Party, al igual que la creación intelectual del Partido Republicano, incluyendo a George Will, que, a raíz de [las declaraciones de] Goolsbee por la cadena ABC, criticó la idea de incumplimiento, simplemente por razones simbólicas.