Publicado hace 16 años por --75301-- a historiasdelagastronomia.blogspot.com

Curiosa historia de cómo un error en un telegrama puesto en 1835 por un pequeño comerciante de Bilbao, por azares del destino, puede cambiar su fortuna, salvar a Bilbao de un aprieto y, quien sabe, popularizar un rico manjar en nuestra gastronomía.

Comentarios

martingerz

para redondear la anécdota, uno de los que metieron el cargamento de bacalao en Bilbao, saltando el cerco carlista, era el bisabuelo de un amigo mio.