Hace 13 años | Por chechin a wired.com
Publicado hace 13 años por chechin a wired.com

Picher, Oklahoma, surgió como una próspera ciudad del siglo XX. La tierra debajo de ella producía la mayor parte del plomo de las balas de EEUU de la I y II Guerra Mundia Mundial y el suficiente zinc para galvanizar, literalmente, la construcción de los suburbios americanos. Cuando la veta se secó en 1970, sumado a los requisitos de seguridad medioambiental que las minas tenían que seguir, las empresas mineras se mudaron. Como resultado; envenenamientos por plomo en arroyos, casas en peligro de derrumbe al estar construidas sobre las minas...